La Educación Pública: Nuestro Futuro

Por Juan Skerl – Presidente del Centro de Estudiantes de Ciencias Medicas – UBA
En este primer año de gestión del Gobierno de Macri se llevaron a cabo acciones que no comparto y que atentan contra ideales que desde la agrupación de estudiantes independientes QRS defendemos día a día. Estas acciones repudiables son las que apuntan contra la educación, y en todos sus niveles.
Desconociendo a la educación como esa herramienta tan importante y fundamental que tiene que tener un país para crecer y desarrollarse Mauricio Macri sacó las becas a los chicos de los colegios secundarios, limitando la continuidad en sus estudios.
Lo vimos con nuestros compañeros residentes que están trabajando en los hospitales públicos del Gobierno de la Ciudad y hace meses que no cobran, y cuando lo hacen cobran uno de los salarios más paupérrimos del sistema de salud. Los años y el esfuerzo que le dedicamos a nuestra formación no se ven correspondidos cuando comenzamos la residencia, desalentando así el estudio de muchos de nosotros. Pero ya sabemos que para Mauricio Macri el esfuerzo no es un valor muy apreciable.
También lo vimos en la Facultad de Ciencias Médicas cuando en mayo se firmaron convenios entre el Gobierno de la Ciudad y universidades privadas, permitiéndoles a éstas realizar sus prácticas en los hospitales públicos, limitando así el cupo de los estudiantes que estamos en la UBA, transfiriendo recursos del Estado a entidades privadas, incentivando el crecimiento y creación de más universidades privadas.
La Educación Pública está en boca de todos, pero lamentablemente somos pocos los que la defendemos. Tiene que ser una política de Estado, se le tiene que dar la importancia que tiene que tener y ponerla en lo alto. La educación no tiene que ser un gasto sino una inversión que apueste a futuro, que no se tapen parches del día a día sino que se piense en años, hacia los futuros estudiantes para que no se sigan perdiendo generaciones enteras como hasta ahora. Tenemos que empezar a pensar al revés de lo que se viene haciendo en donde “mientras menos gente estudie, mejor”, debemos garantizar lo contrario, “mientras más gente estudie, mejor”. Aunque claro, un pueblo educado, estudiando, no ignorante, es más difícil de dominar. Pero también es cierto que ese mismo pueblo tiene un futuro con más posibilidades de crecer, de progresar, de alcanzar sus metas, de ser libre.
Defender la Educación Pública es defender el futuro del país.